Los humanos como seres sociales interactuamos y desarrollamos gran parte de nuestras relaciones sociales e interpersonales en grupo. Por ello, es fundamental trabajar nuestras habilidades sociales. Eso nos ayudará a tener relaciones sanas y satisfactorias, y también nos permitirá desenvolvernos en la sociedad de la mejor manera posible.
El papel de las escuelas en este proceso de socialización es determinante, especialmente en edades tempranas, cuando las personas son más susceptibles a reforzar los comportamientos que observan en los mayores. A nivel educativo, las habilidades sociales se pueden enseñar y aprender.
Aquí te dejamos algunos consejos para que puedas aplicar con tus alumnos:
- Ampliar su vocabulario. Una de las razones por las que se producen malentendidos es por la falta de capacidad para comunicarse con claridad, muchas veces provocada por la falta de vocabulario. Enseñar a los niños a hablar de sus emociones de una manera correcta puede ayudarles a evitar la frustración y saber expresar sus necesidades.
- Fomentar el diálogo. Intenta que el alumnado establezca diálogo con el resto para que pueda expresarse libremente y pueda construir su propio discurso. Cuánto más se desarrolle el diálogo, mejor será el discurso.
- Fomentar la interacción. Hay que facilitar al alumnado la interacción con todo tipo de personas para que desarrollen unas habilidades sociales amplias.
- Sé sincero. Los más peques quieren ser tratados con respeto, sentirse escuchados y comprendidos por los adultos. Aquí el papel de los profesores y profesoras es determinante, tienen que fomentar la escucha activa y la empatía.
- Sé ejemplo. Es muy importante recordar que somos ejemplo de los más peques, y que todo cuanto digamos o hagamos influirá de manera significativa en su conducta.
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