Es esencial que los niños desarrollen su personalidad de forma integral y global. Padres, así como educadores, tenemos la responsabilidad de estimular en paralelo el desarrollo cognitivo y emocional de nuestros niños. ¿Pero qué implica cada uno?
- El desarrollo cognitivo cubre todos los conocimientos, destrezas y habilidades que los niños necesitan aprender para comprender e interactuar con el mundo que les rodea.
- El desarrollo emocional hace hincapié en el aprendizaje y manejo de las emociones que los niños necesitan para relacionarse de manera positiva con el mundo a su alrededor.
No obstante, mientras el desarrollo cognitivo ha recibido gran atención en la práctica educativa, el emocional ha quedado en el olvido: tradicionalmente, las habilidades sociales y el manejo de las emociones no se han atendido de forma explícita en el aula escolar. Tal y como comentaba un profesor de nuestros colegios piloto, “cubrimos muy bien literatura, matemáticas, ciencias, pero nos olvidamos de los sentimientos y emociones de los estudiantes. Y, esto último, es clave.”
A menudo, los niños reciben estímulos que les generan tensión emocional, estrés, frustración, conflictos con sus iguales, irritabilidad, etc. Ya que éstos requieren atención, también será necesaria una formación específicaque haga hincapié en la expresión y la gestión emocional.
Aspectos como la autoestima, la empatía, la asertividad o el manejo de los sentimientos son fundamentales para el éxito personal y profesional. Además, sabemos que la inteligencia emocional puede trabajarse y aprenderse en la escuela igual que otros conocimientos. La cuestión es: ¿cómo?
El primer paso que los niños necesitan dar hacia una educación emocional es identificar, conocer y poner nombre a lo que sienten. Más adelante, empezarán a comprender y controlar sus emociones, pero lo primero es, sin duda, saber reconocerlas y ser conscientes de que todos las tenemos y son una parte importante de nuestra vida.
Trabajando en el aula situaciones, historias, juegos o cuentos que permitan a los niños reflexionar y hacer crecer éstas habilidades en positivo es posible contribuir, abiertamente, al desarrollo emocional.
En Smile and Learn encontramos que cada vez más colegios incorporan en sus programas la enseñanza manifiesta de las emociones. Así, recurren a materiales, actividades de grupo y dinámicas con los siguientes objetivos:
- Identificar y comprender las emociones de los demás.
- Identificar y gestionar las propias emociones.
- Desarrollar la habilidad de automotivarse y generar emociones positivas.
Os aconsejamos algunas actividades sencillas para trabajar el aspecto emocional:
- Aprender a identificar las expresiones faciales: el objetivo es enseñar a entender los diferentes sentimientos y emociones que las personas que nos rodean exteriorizan. Podemos hacer uso de imágenes, fotos o dibujos de caras que representen las diferentes emociones.
- Descubrir cómo somos: es vital trabajar con los niños su identidad y sus sentimientos. Se pueden emplear fotos de los niños señalando contextos, relacionándolos con las emociones que sienten entonces.
- Gestionar y controlar las emociones: el objetivo es mostrar el grado de intensidad de los sentimientos. Os recomendamos dibujar un termómetro y pedirle al niño que indique cómo se siente y que valore en él cuan enfadado, alegre o triste está.
Desde Smile and Learn, estamos decididos a acompañaros, con nuestros juegos y cuentos, en la importante misión de ayudar a los más pequeños en su desarrollo emocional.
Todos nuestros cuentos están inspirados en historias con valores que ayudarán a los niños a comprender las emociones de los demás, a resolver conflictos o a quererse a sí mismos.
También, estamos desarrollando juegos como “Superemociones”, una divertida aplicación que busca reforzar la inteligencia intra e interpersonal a través de más de 200 actividades. Con él, los niños, junto a los monstruos de las emociones, podrán realizar distintas tareas como la identificación de expresiones faciales, la resolución de enfrentamientos o dilemas, la asociación de emociones y muchas más.
¡Y ahora contadnos vosotros! ¿Creéis que el aprendizaje emocional debería incorporarse de forma más explícita en el sistema educativo? ¿Qué recursos y materiales conocéis que puedan utilizarse para trabajar el desarrollo emocional de los niños?
Almudena González,
Coordinadora pedagógica Smile and Learn