Cada vez empezamos a utilizar la tecnología antes, pero ¿se usa bien la tecnología?, ¿sabemos enseñar a los niños a utilizar la tecnología de forma segura?
Lo primero y más importante es dar ejemplo, parte de su aprendizaje se produce por imitación, así que no podemos pedirle al niño que no se obsesione con el móvil o la tablet, si ve a los adultos de referencia pegados al teléfono día y noche.
- Marca normas de uso de los dispositivos estableciendo a qué jugar: lo mejor es usar juegos educativos con valor para su aprendizaje y sin publicidad o compras en la app.
- Establece cuánto tiempo: para los más pequeños (de 3 a 6 años) se aconseja realizar actividades durante máximo 30 minutos. Pueden aumentar el tiempo de juego según van creciendo.
- Cómo jugar: marca normas de juego tranquilo para que no se exciten en exceso y con una buena postura, evitando que tengan el dispositivo muy cerca de los ojos.
- Dónde jugar:deben jugar en presencia de un adulto, utilizarán su ayuda si necesitan recordar las normas de juego responsable y el buen uso del dispositivo.
Uno de los mayores problemas del uso de la tecnología son las adicciones a juegos, redes sociales, consolas o al móvil. Para evitar estas adicciones podemos proponerles cambiar de actividad, salir al parque, hacer manualidades, tocar algún instrumento musical, crear sus propias historias o muchísimas cosas divertidas en familia.
Gracias a las pautas anteriores y a las alternativas que se pueden proponer al uso continuado de la tecnología, podemos hacer que los más pequeños tengan una infancia saludable y equilibrada.
Lo mejor es disfrutar de la tecnología en familia alternando con otras actividades divertidas, leer, jugar, pasear, cocinar…
Raquel Melero
Equipo de educación Smile and Learn
