El lenguaje es una capacidad cognitiva fundamental para el desarrollo y el aprendizaje social. Se compone de 4 ámbitos: la fonología, la semántica, la gramática y la pragmática. Tras analizar la semántica (link aquí) y la gramática (link aquí) hoy hablaremos de la fonética.
La producción de los sonidos del habla es el resultado de un sistema complejo en el que participan diferentes habilidades, órganos y procesos cognitivos. Es fundamental que todos estos aspectos funcionen de forma coordinada para identificar y articular los sonidos que conforman el lenguaje.
La producción del habla se articula en tres niveles diferentes: el anatómico, el fonológico y el fonético. En este post os hablamos sobre la fonología.
El desarrollo fonológico es un proceso complejo que depende de la habilidad del niño para atender a los sonidos del habla y de su capacidad para producirlos. Combinando estos sonidos conseguirá formar palabras.
La adquisición fonológica empieza desde el nacimiento con la emisión de los primeros sonidos del bebé (llanto o balbuceo). Esta etapa se conoce como prelingüística. Entre los 12 y los 18 meses los niños comienzan a emitir sus primeras 50 palabras, proceso que continúa y se va ampliando de forma progresiva hasta los 4 años. A esta edad los niños son capaces de discriminar y producir la mayoría de los sonidos utilizando palabras simples.
En el caso del español, el proceso se termina de completar alrededor de los 6 o 7 años. En este momento el niño es capaz de articular correctamente los sonidos y es capaz de combinarlos atendiendo a diferentes reglas para formar palabras. Al final de esta etapa se dominan las consonantes vibrantes (R fuerte “ratón”) y las estructuras CVC (consonante, vocal, consonante “barco”) y CCV (consonante, consonante, vocal “brazo”).
Partiendo de las diferencias individuales, conocer cómo es el desarrollo del sistema fonológico y qué se espera en cada edad es clave para detectar posibles dificultades y si es el caso intervenir lo antes posible.
En Smile and Learn, hemos diseñado una colección para mejorar el aprendizaje de la fonología a través del conocimiento del sonido de las letras y la formación de palabras. Los juegos incluyen varios niveles de dificultad -pensados para diferentes niveles de competencia lingüística- que van de los 3 a los 8 años.
Almudena González
Equipo de Educación